AL BORDE DE LA INMENSIDAD

El vacío nos completa, nos une
En el espacio infinito no hay nubes
Ni tempestades que enturbien
El espejo a través del cual te miro

Y te acompaño en el despertar
En tanto, las horas, milenios en realidad
Transcurren por estos lados
De aquí para allá
Transformando todo en imperfecta
Irrealidad
Los planetas se dicen y se hacen
Los universos se unen en libertad
Creándose unos a otros
Convirtiéndose más tarde en redes
De brillantes estrellas
Más, como digo,
En este infinito nubes no hay
Y el tiempo no es tal
Y tampoco el olvido
Siempre el ahora está acá
Y la posibilidad de volver a verte
Y el encuentro entre amigos
Alrededor de una mesa
En la que nos reconoceremos iguales
Y nos hundiremos en el polvo de estrellas
Justo cuando el caos nos alcance
Y nos haga finalmente detenernos
Eternos, infinitos y simples.